¿Por qué fue creada Esislam?
A-s-salamu ‘alaykum – La paz sobre vosotros
Cuando decidimos crear Esislam, como fuente de conocimiento de Islam en español, y consideramos qué línea de publicación deberíamos seguir, estuvimos de acuerdo en no traspasar lo que podríamos definir como líneas rojas. Una de ellas era no entrar a comentar de temas políticos. La política levanta pasiones que muchas veces no son legítimas, ya que la visión que tenemos de ella es siempre limitada, estando las fuentes del poder real probablemente más lejos de los ciudadanos que lo han estado nunca en la historia de la Humanidad. Por otra parte, la política puede convertirse en un mundo de astucias, estrategias y premisas que poco han de ver con los principios de la Religión; principios estos que están diseñados para obtener lo mejor de cada persona.
Otra línea roja es la de evitar entrar en provocaciones personales o grupales. Por ello decidimos concentrarnos en nuestra línea editorial, sin mirar a izquierda o derecha; sin entrar en ajustes de cuentas ni en rencillas que nada pueden traer de bueno. Si tienes paz en el corazón, transmites paz al exterior. Y transmitir paz no debe significar de ninguna de las maneras cesar de defender la Verdad, se encuentre donde se encuentre.
Nuestra línea editorial la tuvimos muy clara desde el principio; diseñada para la persecución y la obtención de una serie de objetivos:
En el aspecto religioso habíamos de recuperar ese Islam que se ha dado en llamar el de “La gente de la Sunna y el consenso” (Ahlu-s-Sunna wa-l-Yamaa); Islam que por otra parte ha sido el que durante siglos ha presidido la vida de los musulmanes; desde la época de la Revelación hasta la irrupción en escena de un Islam político, desnaturalizado y banalizado; radicalizado de forma estratégicamente diseñada. El relativo éxito de la irrupción de este falso Islam ha sido producido porque detrás de su prédica se han posicionado los intereses nacionales de países que han invertido en su extensión ingentes cantidades de dinero. Con este dinero se han comprado voluntades y conciencias.
Hay que ver pues esta web como la portavoz en pleno derecho del verdadero Islam. Y este es el Islam de las cuatro escuelas del Fiqh: Maliki, Hanbali, Hanifi, Shafii); el Islam de las doctrinas Ashari y Maturidi; el Islam cuyo Iman e Ihsan estaban representadas de manera legítima por el Tasawuf, tanto que muchos de los legisladores emitían normas legales practicando paralelamente el Tasawwuf.
El combate que algunos de vosotros observaréis esgrimimos contra las falsas doctrinas se produce con la finalidad de arrancar de nuestros hermanos musulmanes estas falsas ideas de moda propiciadas por los promotores, tanto del Islam radical, como del llamado modernista, a veces financiado por los mismos que predican el radical, propiciando dos visiones aparentemente diferentes, pero creadas con el mismo fin, a fin de canalizar por mal camino a los espíritus rebeldes y contestatarios.
Y ahora queda responder a una pregunta que es fácil que se produzca; y es que quiénes somos nosotros para emprender esta ambiciosa empresa que es devolver e la práctica del Islam el honor perdido. Ahora bien, cuando observamos el panorama actual del Islam a nivel mundial y constatamos la extrañísima ausencia de personas y colectivos que sientan la necesidad de liderar esta empresa, entonces sentimos que es ahí donde comienza a basarse nuestra legitimidad. Esto, añadido a que somos seguramente los primeros o de los primeros que adoptamos el Islam en nuestra juventud, ya hace 30 o 40 años, y que en aquellos tiempos aprendimos el Islam legítimo, pues aún existía por aquel entonces.
Por otro lado, aunque lo he dicho en escasas ocasiones, contamos con el apoyo de un gran sabio del Islam que posee todas las Ciencias de la Religión; y una cosa que a todo el mundo se le escapa debido al creciente materialismo en el que viven imbuidos gran parte de loa musulmanes. Me refiero al Permiso de Allah y la forma de obtenerlo, lo cual no queremos explicar aquí, ya que, como acaba de ser dicho, la mayoría no está preparada para comprenderlo; y esto es debido al olvido de Allah generalizado en el que vive hoy por hoy el mundo islámico.
Es por eso que combinamos las publicaciones que podrían ser vistas como “religiosas” o doctrinales con otras disciplinas a fin de que todos se acostumbren a reconocer que el Islam asimismo engloba toda ciencia, así como la Filosofía, la Salud y la Metafísica.
Nuestra segunda finalidad es la del diálogo inter cultural. Nuestro Profeta – sobre él la plegaria y la paz- expresó que todos los seres humanos somos hermanos en Humanidad. Por un lado nuestra manera de ver el Islam acerca el ser Humano a sus propios orígenes, y es por eso que es compartida y aceptada por las personas de buena voluntad. Hoy por hoy la no aceptación doctrinal del Islam por parte de componentes de otros credos se basa fundamentalmente en la no aceptación del profeta Muhammad como siendo un Enviado de Dios. Esta aceptación implicaría muchas otras cosas, y es por este motivo que no se le acepta; no por odio o por desprecio hacia su persona o su mensaje, sino por todo cuanto podría implicar aceptar su profecía.
No obstante, uno de los mandatos del Corán es no obligar ni presionar a otros para aceptar el Islam. Y si la doctrina del Profeta no es aceptada, al menos si lo es, en muchísimas ocasiones, gran parte de la doctrina que él profesó, ya que, queramos o no, se asemeja en muchos aspectos, de forma muy estrecha en ocasiones, a los mensajes de los otros profetas, que han emanado de la misma fuente Divina.
El verdadero Islam puede aportar a la sociedad; ¿por qué no? Puede aportar paz y sabiduría, siempre y cuando seamos consecuentes con su mensaje y no queramos desnaturalizarlo para convertirlo en una herramienta de conflicto por intereses políticos o económicos.
Todos los miembros de todas las religiones pensamos que la nuestra es la mejor; y los musulmanes, no hace falta decirlo, también lo pensamos porque nos basamos sobre la última Revelación. Ahora bien, cuando lo que emana de esta convicción es el orgullo y no la Misericordia; cuando esto nos hace odiar o ser engreídos, inconscientes de que no somos mejores que nadie y que lo que poseemos es por el Favor de Allah, entonces no representamos al Islam; representamos a nuestro ego, al que plantamos ante otros en un permanente conflicto. Si no somos compasión y Misericordia no seguimos la doctrina del Profeta, no seguimos el Islam.
Como lo vemos nosotros, el Islam es la Religión del Amor. Del Amor Divino que quiere y procura lo mejor a todos los seres humanos.
Alabado sea El por toda la Eternidad, el Misericordioso, el Magnánimo