Los conversos españoles sobre la mesa
Abdul Karim Mullor
Los conversos españoles sobre la mesa
He encontrado en un artículo de prensa de 2021 unas curiosas manifestaciones de ciertos personajes que deseaban mostrarse como portavoces del Islâm español. Es impresionante como algunos/as se muestran ante algunos sectores nacionales como los representantes de algo de lo que se encuentran bien lejos. Más específicamente, como portavoces de un grupo de 200.000 conversos españoles (según ellos). De estos, seguramente ninguno , salvo uno o dos, les ha otorgado confianza o representatividad alguna.
Yo mismo soy uno de los pioneros en estas conversiones. Contamos con una cantidad de años en el Islâm que oscilan entre 40 y 47. A pesar de este hecho podemos afirmar que no existe entre nosotros una uniformidad ni de doctrinas, ni de vínculos, ni de lealtades a terceros.
En el artículo que hemos citado se quiere hacer creer a los españoles que los conversos somos una entidad uniforme y totalmente desvinculada de injerencias de terceros países. Como en «Alicia en el país de las maravillas«, todos somos buenos y respetuosos con nuestras culturas locales. Es que, si hay algo que no compartimos con el resto de los españoles es la cultura, precisamente. Estas manifestaciones de casa de muñecas son hechas por alguien que ni tan siquiera cuenta en su haber con 15 o 20 años en el Islâm. No dejan de ser cómicas por lo fantásticas. Es inadmisible en todo caso la “soltura” con la que hablan en hipotética y fantástica portavocía de todos nosotros.
Cierto que los musulmanes españoles somos respetuosos con las leyes, que lo somos con la Constitución. Faltaría más. Pero de ahí a decir que no existen en este grupo de presuntos 200.000 injerencias de países extranjeros, y por añadidura, que somos independientes de cualquier rama doctrinal que proceda de ellos, eso es que no se lo puede creer nadie. Faltar a la verdad nunca dio buenos frutos. Peor aun cuando se hace de manera bastante torpe. Imagino que se hará para contentar a terceros. No puedo encontrar otra razón.
Precisamente, una de las vocaciones de nuestra web y de nuestra comunidad Abu Madian, así como de nuestra asociación ACEDI, no es otra que la de reunir a esa fuerza de musulmanes conversos españoles en un solo grupo. Y esto, muy a pesar de que en ese numeroso grupo podemos distinguir un número de variedad de tendencias que puede llegar hasta las dos cifras.
No he tocado este tema de la falsa representatividad y/o portavocía, no por falta de intención de hacerlo. No lo he hecho debido a ciertos temores que nuestro amado y fallecido hermano Mehdi Flores – que Allâh le tenga en Su misericordia – tenía hacia cierto personaje. El pensaba que dicha persona podría intervenir en hacer daño a nuestra asociación y comunidad religiosa. Mehdi Flores me confesaba que pensaba que detrás de ese personaje había otros más. Quizás tuviera razón. Pero a nosotros no nos agrada temer a otra cosa que no sea nuestro Señor y Señor de todos los universos.
Es más, voy a abrir una puerta por la que hasta ahora nunca habíamos entrado.
Cuando comenzamos nuestra andadura en Esislam, hay que decirlo, recibimos ciertas presiones de una determinada persona para que cerráramos la página. Todo a su tiempo, un día seguramente hablaremos con mayor detalle. Los Whatsapps quedaron en el teléfono de nuestro fallecido secretario de ACEDI – que Allâh lo tenga en Su misericordia – . Lo que es secreto, dejémoslo, no sea que alguien nos diga que no tenemos capacidad probatoria.
Asimismo, en cuanto a mí respecta, y, a pesar de haber sido víctima de una injusticia de parte de alguna persona de cierto círculo, hace ya más de 20 años, no me mueve espíritu de desquite alguno. Sobre y ante todo porque respeto a las personas que perciben su salario, quienes podrían verse damnificadas al sacar a la luz determinadas feas cosas. Y también porque no es de mi estilo devolver golpe por golpe.
Ahora bien, si se aprovecha una plataforma para hacer daño al Islam y a los musulmanes, al no tratarse de algo personal por lo que pudiera serme dicho que busco una causa de legítimo desquite, en ese caso no estoy dispuesto a otorgar concesiones. Las amenazas quedan para los seriales de Agata Christie y de Sherlock Holmes.
No voy a atender a este tipo de «sugerencias». Ya hube de cambiar el contenido de uno de los artículos de Esislam debido a esa clase de presiones.
¡Suficiente!
Nuestro proyecto no es político
Nuestro proyecto no es político. No apoya a ni interfiere en los programas ni intervenciones de grupo político alguno. Nuestro proyecto es claro y se trata de: establecer una doctrina de referencia para los conversos españoles y latinoamericanos; y asimismo un diálogo inter cultural e inter religioso. Lo llevamos diciendo desde la apertura de nuestra web.
En cuanto a la diversificación de ese grupo de presuntos 200.000 conversos podemos decir que es múltiple y vamos a ilustrarlo con ejemplos:
A / Muchos de ellos, entre los que yo me encuentro, abrazamos el Islâm con la ayuda del Sufismo. Procedemos de una bien estudiada comparación entre religiones. Somos el fruto de un estudio científico y pormenorizado de las doctrinas religiosas a nivel universal.
Bien es cierto que en los años 70 las referencias sufís eran pocas. Ahora ha surgido una amalgama de propuestas, quizás, eso es lo que parece, tendentes a impedir una uniformidad que pudiera cristalizar en un sólido grupo. Un tipo de injerencia externa procedente de ciertos países que poco han de ver con el Islâm
B / Con la llegada del Centro Cultural Islámico de Madrid algunos se identificaron con el Wahhabismo, Islam político procedente de Arabia Saudita, y sus aliados salafistas, tablighistas y algunas doctrinas anexas a ellas. Sueldos suculentos; peregrinaciones de regalo; puestos de trabajo en el ámbito de influencia, etc.
C / Otro grupo fue adscrito al pulpo multibrazo de los Hermanos Musulmanes, debido seguramente a convincentes incentivos económicos.
D / No hay que olvidar a un nutrido número de personas que se islamizaron en virtud de sus matrimonios con nativos/as de países musulmanes. En estos últimos sea quizás en los que se advierta una cierta falta de militancia o adscripción a grupos específicos.
Sea como sea, eso lo vemos a diario, existen fuerzas localizadas en ciertos agentes que buscan por todos los medios a su alcance impedir que los musulmanes españoles tengamos un proyecto común.
Conocemos las causas, lo cual es ya la base para una acción posterior. Para conseguir nuestros fines contamos con un enemigo importante: el Dinero. Luchamos contra gigantes económicos que adiestran ciertas inteligencias en el apoyo a su sistema de pensamiento.
En español existen varios canales de prédica del Islam que cuentan con personajes bien remunerados (hablamos de 5 cifras mensuales de dólares o euros) para transmitir y vender una clase de Islâm que no deja de ser una droga dura de la que muchos tienen necesidad perentoria de desintoxicarse.
Esta doctrina, cual droga, excita y radicaliza. Podemos ver en sus adeptos las marcas del síndrome de abstinencia cuando alguien les contraría con razones bien fundamentadas.
Resumiendo
Esa fantasía de que existimos 200.000 conversos españoles al Islâm todos con uniforme, cogiditos de la mano y proclives a la cultura del Telediario, es de lo más cómico que he podido escuchar hasta hoy.
Nuestra cultura es la del Islam. Lo que vivimos en nuestras casas es el Islam. Lo que enseñamos a nuestros hijos es el Islâm, y no permitimos injerencias de los educadores.
Pero, como el Islam nos obliga a ser respetuosos con las leyes, con las personas, y a ser misericordiosos con propios y extraños, podemos decir que nos integramos en la sociedad al mismo nivel que el resto de los españoles, aun sin compartir con ellos ni pensamiento ni cultura.
A ver: mentir para “quedar bien” no es una buena estrategia. Quién miente hoy a unos lo hará a otros mañana, según la conveniencia.
Decir la verdad trae amigos, aquellos que perdimos por querer “quedar bien” mediante una mentira.
La mentira se encuentra en las antípodas de la Fe – hadiz