Guía del nuevo musulmán – II

LOS 99 NOMBRES DE ALLAH
1 – Allâh – Nombre de Dios Mismo como divinidad absoluta
2 – A-r-Raḥmân – El Todo Misericordioso
3 A-r-Raḥîm – El que Manifiesta Su Misericordia
4 – Al Malik – El Rey, el Soberano
5 – Al Quddus – El Santo
6 – A-s-Salam – El que es El Mismo la Paz
7 – Al Mu’min – El Creyente, el Sostén de toda serenidad
8 – Al Muhaymin – El Envolvente, El que es dueño de toda situación
9 – Al Aziz – El Poderoso, el Precioso
10 – Al Ŷabbar – El Dominador
11 – Al Mutakkabir – El Soberbio
12 – Al Jâliq – El Creador
13 – Al Bari’ – El Hacedor
14 – Al Muṣawwir – El Formador
15 – Al Gaffâr – El Todo perdonador
16 – Al Qahhâr – El Dominante
17 – Al Wahhâb – El Dispensador de dones sin límites
18 – A-r-Rassâq – El Dador de todo sustento
19 – Al Fattâḥ – El que abre, el que da la victoria
20 – Al ‘Alîm – El Sabio, el Omnisciente
21 – Al Qâbiḍ – El que arrebata, el que da la apretura
22 – Al Bâṣit – El que ensancha, El Dador de consuelo
23 – Al Jâfiḍ – El que abate, el que precipita
24 – A-r-Rafi’ – El que exalta, El que eleva
25 – Al Mu’iss – El que honra, El que fortifica
26 – Al Mudill – El que humilla
27 – A-s-Sami’ – El Oyente, El que todo lo oye
28 – A-l-Baṣîr – El Vidente, El que todo lo ve
29 – Al Ḥakam – El Juez
30 – ‘Adl – El que imparte justicia
31 – A-l-Laṭîf – El Sutil, El que cuida, El propicio
32 – Al Jabîr – El Enterado de toda cosa
33 – Al Ḥalîm – El Tolerante, El Magnánimo
34 – Al ‘Aẓim – El Inmenso, El Inabarcable
35 – Al Gafûr – El Remisorio
36 – A-š-Šakûr – El Que Agradece, El Retribuidor
37 – Al ‘Aliy – El Sublime, El Elevado, El Exaltado
38 – Al Kabîr – El Magno, El Grandioso
39 – AL Ḥafiẓ – El Preservador, El Solícito
40 – Al Muqit – El Sustentador Omnipresente, El Capaz
41 – Al Ḥasîb – El Estimado, El Ponderado
42 – Al Ŷalîl – Al Magnífico, El Majestuoso
43 – Al Karîm – El Munificiente, el Generoso
44 – A-r-Raqîb – El Vigía
45 – Al Muŷîb – El que da respuesta
46 – Al Wasi’ – El Extenso
47 – Al Ḥakîmu-l-muṭlaq – La Autoridad Absoluta, el Gobernador
48 – Al Wadûd – El Amante, El Amigo
49 – Al Maŷîd – El Glorioso
50 – Al Ba’iz – El que resucita, el que produce o suscita
51 – A-š-Šahîd – El Que da Testimonio, El Testigo
52 – Al Ḥaqq – El Que es El Mismo la Verdad
53 – Al Wakil – El Integro, El que es Digno de toda confianza
54 – Al Qawîy – El Fuerte
55 – Al Matin – El Firme, El Inquebrantable
56 – Al Walîy – El Amigo Protector
57 – AL Ḥamîd – El loable, el Digno de toda alabanza
58 – Al Muḥsi – Al que hace la cuenta
59 – Al Mubdi’ – EL Originador a partir de la nada, el que Manifiesta
60 – Al Mu’id – El que hace retornar hacia Si Mismo
61 – Al Muḥyî – El Dador de la vida
62 – Al Mumit – El que da la muerte
63 – Al Ḥayy – El Viviente
64 – Al Qayyum – El Que subsiste por Si Mismo
65 – Al Wâŷid – El que se basta a Sí Mismo, el Constante
66 – Al Waḥîd – El Unico
67 – A-ṣ-Ṣamad – El Inexpugnable
68 – Al Qadîr – El Autor de Todo Decreto, El Dotado de total capacidad
69 – Al Muqtadîr – El Dominante, El que es Poderoso en Si Mismo
70 – Al Muqaddim – El Que aproxima hacia Sí Mismo, El Adelantado
71 – Al Mu’ajjir – El Que aleja, el que retarda
72 – Al ‘Awwal – El Primero
73 – Al ‘Ajîr – El Último
74 – A-ẓ-Ẓahîr – El Exterior
75 – Al Batîn – El Interior, el Oculto, el Inmanente
76 – Al Wâlî – El Regidor
77 – Al Muta’alî – El Que se eleva
78 – Al Barr – El Veraz, El Que se mantiene Fiel a Su promesa
79 – A-t-Tawwâb – El Que acoge a todo aquel que se arrepiente
80 – Al ‘Afûw – El Que absuelve, El que borra toda mancha
81 – Al Muntaqîm – El que toma venganza
82 – A-r-Ra’uf – El Que se compadece
83 – Malîku-l-mulk – El Rey de reyes, El que posee la absoluta soberanía
84 – Dû-l-Ŷalâli wa-l-‘Ikrâm – El Señor de la Majestad y la Generosidad
85 – Al Muqsîṭ – El Equitativo
86 – Al Ŷami’ – El Que contiene y sintetiza toda cosa
87 – Al Ganî – El Rico, la fuente de toda riqueza
88 – Al Mugnî – El Que enriquece
89 – Al Mu’ṭi – El Que prodiga, El que otorga toda cosa
90 – Al Mani’ – El Que arrebata, El Que rehúsa
91 – A-n-Nafi’ – El Propicio, El que da holgura y desahogo
92 – A-ḍ-Ḍarr – Al Adverso, El que provoca la apretura y el agobio
93 – A-n-Nûr – La Luz, El Que es El Mismo la luz
94 – Al Hâdî – El Guía
95 – Al Asâlî – El Eterno sin comienzo
96 – Al Bâqî – El Eterno sin fin
97 – Al Warîz – El Heredero
98 – A-r-Rašîd – El Guía, El Consejero
99 – A-ṣ-Ṣabûr – El Paciente
Es conveniente tener en mente el significado de todos estos nombres, al menos en la memoria. Pero mejor aún es comprender que los acontecimientos de nuestra vida se encuentran íntimamente ligados a ellos; que todo aquello que nos acontece se debe a la activación de uno de estos nombres, ya sea aparentemente bueno o aparentemente negativo. Allâh se manifiesta en ellos, nos educa, nos muestra Su Presencia para que le conozcamos al menos en alguna pequeña medida. Cuando recibimos un bien que no esperábamos es el Generoso quien nos lo otorga; cuando sanamos de una enfermedad es Al Laṭîf (El que cuida) quien nos sanó; se muestre con el Nombre que El desee, siempre es Allâh, y esto es lo que al menos debemos comprender para llegar a saber que todo procede de Su Poder y de Su Voluntad; que no hay nadie que da o sustrae sino El. Conociendo esto habremos comprendido en gran medida lo que somos con respecto a Allâh, habremos realizado una buena parte de nuestra condición de servidores Suyos.
El Din de Allâh (A-d-Dînû-l-Lâh) es en esencia un descenso de la Verdad, desde las altas cumbres de la Realidades Divinas hasta nuestro mundo psíquico y corporal; y ello a fin de que seamos instruidos por dicha Verdad y seamos liberados de nuestras bajas pasiones, así como de tener un final no deseado. Es asimismo una transmisión que implica instrucción a todos los niveles, desde los más básicos hasta las cimas más elevadas de la ciencia y de la sabiduría. Es por ese motivo que el conocimiento de los Nombres Divinos reviste una gran importancia para al menos conocer cuáles son las diferentes maneras en las cuales se manifiesta la Presencia Divina en el contexto de nuestras vidas y de el Universo entero.
Hadiz qudsi:
Yo era un Tesoro Oculto y me quise dar a conocer; para ello creé la Creación