Entrevista a Hamza Castro
La paz sobre vosotros – Hoy Esislam entrevista a Hamza Castro.
Para quien no lo conozca, Hamza es un granadino que lleva treinta años practicando el Islam. Comenzó su periplo en un grupo sufí de Granada, su ciudad natal. Después de algunos años de práctica y adquisición de conocimientos, por un golpe del Destino se convirtió en un amante del “ney”. El ney es una flauta turca hecha de caña que ha sido utilizada por los derviches turcos desde hace siglos. Fue hecha famosa por Ŷalaluddin Rumi, célebre maestro sufí que se instaló en Kony, donde conoció a Šamas Tabrizi y Muhiyyuddin Ibn ˤArabi de Murcia.
Se dice que la tradición de los derviches giróvagos cuya danza era acompañada por el ney procede de los seguidores de Rumi de la generación siguiente a él; no obstante, otros dicen que procede del mismo Rumi. Sea como fuere, nadie puede negar tanto la belleza espiritual tan sugestiva de esta danza así como su belleza plástica. Lo mismo ocurre con el ney, cuya melodía recuerda a la nostalgia del alma que es separada de su Señor, pues:
De El somos y a El hemos de volver.
Hamza, como dice él, se ha convertido en “un buen neyzen”, aunque después de haber escuchado su interpretación, ni nosotros ni vosotros sabrá distinguir su habilidad con el instrumento de la de un maestro. El ha intervenido en no pocos conciertos, tanto en Europa como en Turquía. Pero, mejor que nos lo cuente él:
LA ENTREVISTA
Presentamos primeramente una actuación suya y posteriormente más abajo encontraréis la entrevista.
Esislam: Gracias Hamza por haber accedido a nuestra petición de hacerte esta entrevista. Después de esta pequeña presentación que hemos hecho sobre ti, quisiéramos saber algunas cosas más, a fin de dar una imagen más detallada sobre tu persona y tus actividades en el dominio del ney y de la sama.
Primeramente quisiera preguntarte cómo diste con el ney.
Hamza Castro: El primer encuentro que yo tuve con el ney fue hace muchos años en el Palacio de Congresos de Tarragona. Fui invitado con una comunidad sufí de Granada para tratar de explicar y exponer todo lo que hacíamos aquí: la oración, el Azam, un poquito de ‘adab, y sobre todo ofrecer de una velada sufí que solíamos hacer los jueves aquí en Granada.
Este encuentro estaba organizado por unos gnósticos cristianos que invitaron a judíos, musulmanes, cristianos, budistas y a cualquier tipo de personas que tuvieses un olor religioso o místico. Entonces el último evento que se hizo ese día fue presentar el Sufismo, y ellos solían hacer presentaciones previas a cualquier evento.
Y recuerdo a un hombre con una presentación exquisita donde puso como ejemplo a un gran místico musulmán llamado Mevlana Rumi. Yo en ese momento no sabía quién era, y él lo presentó. Me quedé la verdad muy impactado con la vida de este hombre, pero no sabía que lo siguiente era exponer un breve vídeo donde aparecía su imagen típica que tenemos todos en la memoria donde se le ve con una barba blanca y con un turbante. El video Iba acompañado de un sonido el cual cuando lo escuché fue un impacto tan brutal que no pude permanecer de pie y me tuve que sentar de la emoción.
Yo le decía a mi compañero – “¿qué es eso?” – y él me decía – “es una flauta” – y yo le dije – “no, una flauta no suena así” – “sí, sí, es una flauta que utilizan los pastores en Turquía.”
Ese fue mi enamoramiento hacia la flauta, el instrumento por excelencia de la música sufí, que no es otro que el ney, la flauta de caña.
Esislam: ¿Cuál es tu percepción sobre esa famosa poesía de Rumi que habla del junquillo y el ney?
Hamza: Una de las cosas que yo creo que Meulana Rumi quiere expresar en esta extraordinaria poesía que abre Masnaví es que no se ha encontrado una palabra donde se pueda definir de una manera infalible y clara como expresar el deseo de estar con Dios, con Allâh; cómo lo puedo definir con una sola palabra; al no encontrar esa palabra, la declaración más clara, precisa y sencilla para definir mi anhelo por acercarme a Él es escuchar el sonido del ney, el instrumento por excelencia de la música sufí. Si realmente quieres saber y entender cómo se siente un creyente que quiera estar con Allâh, un ejemplo para mí absoluto es el sonido del ney
Esislam: ¿En tus años de experiencia con él has llegado a captar que en él se encuentre algún tipo de secreto o de vida?
Hamza: Son ya unos pocos años que estoy con la práctica y con el estudio del ney, y para mí el ney es como un termómetro del estado interior. El ney te exije tener una conexión sincera, sencilla y muy sutil para que el pueda expresar todas sus cualidades. Si no estás en ese estado el ney no suele responder. Por lo tanto, exige que te esfuerces, que seas muy sensible, que practiques mucho, y la verdad es que me ha ayudado a ser…en definitiva mejor persona, porque el ney, a mí particularmente a mí, me saca ser más sensible, más generoso; me saca lo mejor; y para mí eso es el arte. Si consigues ser mejor persona a través del arte u otra expresión creo que tienes el éxito garantizado

Esislam: ¿Cuántos años has estado dedicado a aprender y al estudio de todo lo concerniente con el ney y la sama?
Hamza: La verdad es que no ha sido sencillo porque yo aprendí solo, teniendo familia, teniendo negocios. Viajando, trabajando, quitándome muchas horas de sueño, a base de ser muy cabezota y constante. Empecé solo, la verdad, sin saber si lo hacía bien o no. Pero creo que Allâh puso en mi corazón un anhelo invencible, al principio, con el cual superé todo tipo de obstáculos para hoy ser “un buen neyzen”. El grado de maestría es muy difícil, eso lo consiguen muy pocos. Pero ha merecido la pena porque en este recorrido he dado muchos conciertos, he trabajado; he grabado CDs, DVDs, ha conocido a gente increíble y he tenido experiencias impresionantes.
Al principio conocí al neyzen de Tanger Abdul Wahid Senhaji del grupo “Ensemble de Ibn Arabi”; luego pude conocer a Omar Faruq Tekbilek, uno de los músicos turcos más prestigiosos del mundo; luego pude conocer en París a Sadrettinin Ozçimi, Ahmen Sahin, Ali Erol, a la orquesta Mevleví de Konya. Más tarde conocí músicos, sobre todo árabes que me enseñaron mucho, y luego tuve el privilegio de ser alumno de la Orquesta de los Derviches giróvagos durante cuatro años. Allí realmente me di cuenta de que no tenía nivel y de que quedaba mucho camino por recorrer. Pero bueno, ¡estamos en ello! La verdad que ha sido un camino precioso hasta hoy.
Y sobre el sema’ pues no sé tanto como con el ney. A pesar de haber estado cuatro años con la orquesta Mevleví me he dedicado sólo y exclusivamente a la técnica del ney, aunque cada sábado venía la gente a ver la orquesta Mevleví y yo tocaba, antes, unas piezas como de telonero. Lo que si te puedo decir es que del sama no aprendí a girar, pero si aprendí, y embebí y absorbí lo que son los derviches giróvagos de Konya: gente humilde, gente muy perfeccionista, musulmanes ejemplares, la verdad. Un gran regalo de Allâh y un orgullo haber estado todo ese tiempo con ellos.
Esislam: ¿Qué captas cuando ves que alguien hace la sama? ¿Piensas que existe en ella una conexión con lo Divino?
Hamza: Como te comenté en la pregunta anterior no he tenido el honor de aprender a girar, pero si he visto casi a diario el giro. Y lo que yo veo cuando hay un semazen, un derviche giróvago, delante de mí lo primero que trasmite es mucha serenidad, mucha paz, mucha conexión y mucho desapego. Si existe en ella una conexión con lo Divino cada cual tiene su encuentro; cada cual dependiendo de la pureza de su corazón encuentra una cercanía o no con Allâh. Te vuelvo a repetir que tanto los derviches giróvagos (semazen), como los neyzen lo que trasmiten es serenidad, humildad, trabajo, esfuerzo y ganas de ser, en definitiva, buenas personas; esto lo da el Islam y lo potencia de alguna manera esta práctica del ney y del sama. Esa es mi opinión.
En definitiva, hablando de una manera muy sencilla quizá lo más llamativo es que en cuanto a la conexión con lo Divino es que tú estés lo mejor posible, contigo mismo y con tu entorno. Y ahí puede ocurrir con la Misericordia de Allâh, cercanía.
Esislam: ¿Qué representa Konya para ti?
Hamza: Konya para mí es prácticamente como mi casa. Yo nací y viví en Granada, pero esta experiencia de Konya me ha hecho vincularme a ella de por vida. Hay tres ciudades en las que yo he sentido algo único. Una es mi ciudad, que es Granada, evidentemente mi familia, mis hijos, todo lo que ha representado esta ciudad; Medina al Munawara, las dos veces que pude ir, sentí eso también; algo muy especial, y Konya; especialmente en el museo de Rumi donde está enterrado. Yo diría que Konya es la fuente: una fuente de creatividad, de conocimiento, y una gente de una generosidad que no he visto jamás.
Esislam: Con respecto al Islam, ¿cómo fue tu contacto primero con él?
Hamza: Mi conversión al islam ya hace unos cuantos años; ya he perdido la cuenta; el 30 de octubre de 1993. Fue de la mano de un chayj muy importante que vivía por aquí en España, y puso mi nombre de Hamza; y la verdad es que tengo un recuerdo único de ese momento. Fue como volver a nacer; no lo olvidaré jamás.
Esislam: Con respecto a tus giras; ¿cuál o cuáles han marcado más tu trayectoria?
Hamza: Han sido muchas, gracias a Dios. La primera fue sin duda mi primer encuentro con Omar Faruq Tebilek. La clase que me dio en Granada después de un concierto encendió definitivamente la llama en mi corazón para investigar y estudiar el ney. Más tarde, en el 2005, el encuentro con los derviches giróvagos en París. También el encuentro con una orquesta del festival Sete soles, Sete Luas donde encontré músicos grandiosos como Habib León y José Peishoto del grupo Madre Deus. Ahí te hablo ya de una manera puramente musical, una experiencia inolvidable, y luego mi última etapa en Konya, eso ya ha sido definitivo. Los derviches giróvagos sin duda es la mejor experiencia que he tenido jamás.
Esislam: ¿Y Granada? ¿Te ha inspirado tu ciudad en alguna medida en tu trayectoria artística?
Hamza: Granada es una ciudad muy especial. Está rodeada de montañas, tiene mucha fuerza; la gente de Granada tenemos un carácter. Algunos llegarían a decir “mal carácter”; lo que se dice en granadino que tenemos “mala follá”.
Pero es cierto, tenemos muchos referentes como García Lorca, Enrique Morente; y teniendo en cuenta todos los poetas que he conocido…Hay algo especial en Granada; una especie de color, de sabor, que da esta ciudad, muy especial. Normalmente los artistas granadinos algunos dicen que es por el clima; otros que es por las calles morunas; algunos he escuchado que decían que era por el roce de las farolas de Plaza Nueva. Pero lo que si te puedo decir es que, los artistas de Granada… esta ciudad inspira. Tiene una belleza muy especial, y tiene una fuerza brutal. La tierra, el agua, el color; en definitiva quizás me ha inspirado más de lo que yo hubiera imaginado.
Esislam: ¿Cuáles son tus planes de futuro y tus aspiraciones?
Hamza: Mis planes de futuro ahora mismo es seguir dando clases de ney que doy online; impartir cursos online, y también presenciales; me he descubierto esta faceta tardía. Amo enseñar y parece ser que se me da muy bien. Allí en Konya cuando viví cuatro años el Ayuntamiento me invitó a dar clases a jóvenes, y la verdad se me dio muy bien. Fue una experiencia increíble, y estoy próximo a grabar un CD nuevo de ney y seguir dando conciertos. Este es el objetivo que tengo a corto y medio plazo
Esislam: Y para terminar te dejamos comentar cualquier otro aspecto en el que tú quieras incidir.
Hamza: Para finalizar me gustaría comentar que soy desde hace algunos años el presidente de la “Casa Rumi de España”, que creé en Konya para tener un vínculo especial con esta ciudad. La verdad es que tenía muy buena relación con el concejal de Cultura; se me ocurrió esta idea. Se lo planteé a ellos y estuve bastante años allí realizando diversas actividades, presentando Casa de Rumi; y la idea es, cuando nos permita la pandemia, crear un vínculo con actividades que se hagan en España con la cultura turca que es muy rica como la pintura de agua, la música, el ney, el sema, los derviches giróvagos, la escritura. En fin, un encuentro turco – español a través de la visión y de la imagen de este místico musulmán que es Mevlana Rumi.
Muchas gracias por tu invitación y desear a todos que estén bien, que tengan mucha salud y
A-s-salamu ‘alaykum
Esislam: Gracias Hamza, los componentes de Esislam te deseamos mucho éxito en tu vida y actividades.
Un fuerte abrazo.