Cómo comenzar correctamente el mes de Ramadan

En el Nombre de Allâh – El Todo Misericordioso – El que despliega la Misericordia

Y la plegaria y la paz sobre nuestro señor Muḥammad, su familia y compañeros.

Se acerca el Ramadán; cualquiera que conserve en su interior algo de pudor y de amor siente que se acercan los días sagrados en los que Allâh pide un sacrificio a todos los musulmanes. Los corazones se sobrecogen, las almas se alertan, los siervos de Allâh se preparan para ese gran mes, durante este gran mes de Ša’aban, en el que nos encontramos actualmente.

Cada año, como si de una competición se tratara, a ver quién llega el primero, hay gentes que, haciendo acopio de falta de pudor y sensibilidad, anuncian el día exacto de comienzo de Ramadán algunos días antes. Algunos, unas horas antes, cosa que, desde el punto de vista de la Šari’a islámica es una vulneración de las Leyes divinas explicadas en el Corán y en la Sunna. Se trata de una innovación dañina (bida’), y aquél que la invente o la patrocine no tiene más que sentarse y esperar la respuesta de Allâh, la cual sin duda le llegará.

¿Cómo es posible mantener una actitud semejante y llamar a las gentes al ayuno de Ramadán? Gentes estas son de aquellos de los que, como bien dice el Profeta – sobre él la plegaria y la paz – pasarán hambre y sed en Ramadán sin recompensa alguna. ¿Os parece poco jugar con las prescripciones divinas y llamar a las gentes a la sedición?

Lo decimos cada año: hay que ver la Luna al ojo limpio, tanto al comenzar el Ramadán como a la hora de festejar el ˤAid, terminando así con el ayuno. Y hay que decirlo de nuevo y repetirlo una vez más:

¡Es desaconsejable (makruh) ayunar el último día de Ša’aban y está prohibido (Ḥaram) ayunar el día del ˤAid!

¡Por esto, y por cumplir con la prescripción del ayuno es absolutamente necesario comenzar y terminar correctamente!

¿Qué pretenden todos estos que predicen mediante la astronomía el comienzo del mes, siendo que nuestro Profeta nos dice que somos una Comunidad que no calcula, hablando de esto precisamente?

Además de esto, debemos decir que no vale con visualizar la Luna al telescopio. Si no la vemos, no la vemos. Es más, las lentes deforman la imagen pegando a ella la luz que ellas emiten. Luego ver en el telescopio no es ver en realidad.

¿Qué pretenden estos que eso hacen y dicen que toda la Umma ha de ayunar los mismos días, cuando hay un hadiz de sayyidina Uzman – que Allâh esté satisfecho de él – que nos dice que cada uno ha de seguir la Luna de su región, siendo que el Profeta nos ha ordenado seguir la Sunna de los compañeros?

Os diremos lo que pretenden: pretenden medir vuestras voluntades, sopesar cuántas gentes les siguen, calibrar el estado de su poder; saber hasta qué punto estáis sometidos a ellos.

¡Por Allâh, son una secta! Pretenden en suma que os vinculéis a ellos, y no a Allâh y a Su Enviado.

Son las gentes de la división; son aquellos que cuando les dices no extiendas la corrupción en la Tierra responden: solamente somos reformadores. Son los aliados del enemigo de Allâh y del Ser humano.

¿Qué trabajo les cuesta salir a observar el creciente? ¿Acaso su orgullo se va a ver por los suelos? ¿Son estas gentes que escuchen consejos o son orgullosos que levantan la frente cuando se les demuestra que están equivocados?

¿Qué clase de orgullo tan nefasto y corrupto es ese que por quedar por encima haya que renegar de ayunar el Ramadán de manera correcta, haciendo así renegar a otros?

¡Qué casualidad hermanos/as que casi todos los años se comienza y se termina un día  antes en Algeciras que en Ceuta cuando solamente hay 30 kilómetros de distancia!

Esto demuestra que aquellos que os dicen el día que comienza el Ramadán en España os están engañando; están abusando de vosotros. Y, como dice el hadiz:

Quien no tiene pudor no tiene fe

¡Oh tú! Si eres de esos sabe que no tienes Fe, que no te cuenta como Fe estar de acuerdo con los seis pilares del Imam, porque la falta de pudor te la anula.

Porque cualquiera que tenga pudor siente vergüenza de esta osadía promulgada por algunos. Y si vergüenza ajena sentimos al observar un hecho tan execrable, ¿Qué no debería de ser para aquél que la promulga?

Es nuestro deber repetirlo y volverlo a repetir:

En España como Comunidad Abu Madiam aconsejamos a todos los musulmanes comenzar y terminar el Ramadán con Marruecos, país en el que se cumple el Fard (obligación religiosa) de salir a ver la Luna.

No basta con decir que en tal o cual mezquita dicen de empezar otro día: eso no es válido. Y si las mezquitas, la mayoría al menos, se encuentran regidas por gente sin escrúpulos, ya llevamos años y años así, y esto ya no representa una excusa; porque el que más y el que menos sabe que lo que mueve y conserva esas mezquitas es la política y el dinero.

Nuestra comunidad Abu Madiam propuso formar un comité español para ver el creciente. Nuestra propuesta, a pesar de que todos supieron sobre ella, no fue ni tan siquiera contestada. Es así como se encuentra el Islâm en España. Aquí no cuenta la religión; cuenta el dinero, la política, el poder, el control y la falta de escrúpulos que es visible en tantos y tantos que rigen tantas y tantas mezquitas.

Ante esto el ‘adab del Islâm no es callar, dejando la corrupción ir y venir a sus anchas.

¡Ante esta situación el ‘adab del Islâm es denunciar lo corrupto y predicar el Bien que es lo que estamos haciendo hoy!

Lâ ilâha ‘illâ Allâh Muḥammad rasulu-l-Lâh